Cómo la refrigeración eléctrica está transformando la entrega de última milla
La última milla es la parte más crítica, más costosa y más visible de la cadena de suministro. También es el punto donde la calidad de los productos perecederos corre mayor riesgo. En Corunclima, estamos a la vanguardia de esta revolución silenciosa. Nuestra gama de unidades de refrigeración para transporte totalmente eléctricas está diseñada específicamente para las exigencias y los matices de la entrega de última milla.

1. Cero emisiones, máxima responsabilidad:
Operar en entornos urbanos densos significa contribuir a un aire más limpio. Nuestras unidades eléctricas producen cero emisiones. Esto permite que su flota opere en Zonas de Bajas Emisiones y Zonas de Ultra Bajas Emisiones y sus alrededores sin restricciones ni sanciones, lo que garantiza el futuro de sus operaciones frente a las regulaciones ambientales cada vez más estrictas.
2. Funcionamiento silencioso para entregas sin restricciones:
Imagine realizar entregas a primera hora de la mañana o a última hora de la noche en zonas residenciales sin molestar a nadie. Las unidades eléctricas de Corunclima funcionan a niveles de decibelios significativamente más bajos que sus homólogas diésel. Esto amplía las franjas horarias de entrega, mejora las relaciones con la comunidad y le permite atender a sus clientes según sus horarios, sin depender de las limitaciones de su equipo.
3. Precisión y confiabilidad inigualables:
La carga perecedera es delicada. Nuestra avanzada tecnología de compresores eléctricos proporciona un control de temperatura excepcionalmente preciso, garantizando que sus productos, ya sean vacunas congeladas o salmón fresco, lleguen en perfectas condiciones. La consistencia de la energía eléctrica elimina las fluctuaciones de temperatura comunes en los motores diésel, garantizando así la integridad desde el almacén hasta la puerta del cliente.
El futuro de la logística de última milla es eléctrico, de principio a fin. Las unidades Corunclima están diseñadas para integrarse a la perfección con el chasis de vehículos eléctricos (VE). Pueden alimentarse directamente de la batería del vehículo, creando un ecosistema de entrega totalmente eléctrico y altamente eficiente. Esta sinergia reduce drásticamente el coste total de propiedad al eliminar el combustible diésel y simplificar el mantenimiento.
Más allá de los beneficios ambientales y sociales, la justificación comercial es clara. Menores costos de combustible (la electricidad es más económica que el diésel), menor mantenimiento (sin aceite de motor, filtros ni sistemas de escape complejos) y el cumplimiento de los incentivos ecológicos resultan en un Coste Total de Propiedad (TCO) significativamente menor. Además, demostrar su compromiso con una entrega sostenible y limpia es un potente diferenciador de marca que resuena profundamente con los consumidores conscientes de hoy.
El último tramo es tu último apretón de manos con el cliente. Que sea limpio, tranquilo y confiable.




